Teodosia Gandarias
HANC MARGINIS EXIGUITAS NON CAPERET. Conjeturas. Ezequías y Fermat. El verso y el logaritmo. Una poesía tiene algo de matriz vectorial, un polinomio de letras que tiende a infinito, una derivada de asonancias cartesianas. “Diálogos de amor de León Hebreo”. Es su última obra, edición crítica del manuscrito original que Suárez de Figueroa, “El Inca Garcilaso de la Vega”, tradujera del Diálogo Humanístico escrito por León en 1502. Sofía y Filón, la sabiduría y su amante dialogando en la arcadia de Getafe. Ezequías Blanco procede de la Castilla que el paso de los siglos ha hecho eterna. Pasó su juventud de escucha atenta en Salamanca, donde aprendió a amar al castellano y a recostarse en los poetas que engalanaban los altares con sus trinos y sus aguas desbordadas de alejandrinos. San Agustín García Calvo: libre te quiero como arroyo que brinca de peña en peña. Libre es su verso, hay canto de jilgueros y amarillo en sus palabras espaciosas. Truenan los parques con algarabía de golondrinas palabreras. Están su poemas llenos de gentes que se afanan y luchan. Ezequías escribe ecuaciones diferenciales entre los árboles, en los bancos, ensartando un cántico de jirones de oro. Y está su luna llena recargando con versos los corazones candentes.
Cada farola tiene una historia que contarte. Ex-catedrático del lenguaje y editor de revistas de vanguardia. Necesitaba no quedarse sin márgenes donde anotar su amor por la escritura, tanto como Fermat por su conjetura, y se sacó de su chistera la que ha sido la revista de referencia en la literatura española durante décadas. Algo rebelde, es un niño Chole mochilero y romántico de guedeja blanca y mirada clara, underground. Por su revista han pasado los clásicos, los modernos, los posmodernos y los antiguos, los mejores autores contemporáneos de la lengua castellana, los mejores fotógrafos, los mejores pintores, los mejores artistas: “CUADERNOS DEL MATEMÁTICO”. El matemático era Puig Adam, que escribió libros junto con Rey Pastor para los escolares a los que tanto enseñó Ezequías en su instituto de enseñanza media de la villa getafeña.

Último volumen de CUADERNOS DEL MATEMÁTICO, editado en marzo de 2018. Una pieza perseguida por los bibliófilos.
“Por un puente de sueño sube hasta el sol el pobre carro. Viene herido de lejos por las aristas duras del caleño. Hábilmente lo vira el lento arriero —ya auriga por la luz—. Ya tú basterna de la dicha”. Son versos de “Los Caprichos de Ceres”, II Premio Nacional de Poesía “Ciega de Manzanares”, de 2003. En el verano, Ezequías se va con Sancho el Bravo y con sus monos que estornudan —sólo hay una clase— a su barenostrum de Paladinos del Valle, en Zamora, a escribir por los márgenes sus conjeturas y sus teoremas consonantes. Bares, qué lugares tan gratos para conversar, no hay nada como escuchar sus poemas de amor en un bar bebiendo valgas —valdepeñas con gaseosa, sangría—: “Al noble y seco barro lo seducen diosas rubias de paja. En mullidas praderas se prepara su tálamo. Besos de peces nadan por el gozo de adobe y una cisnera oficia el rito que el agua enlaza para siempre”. Leyendo a Ezequías Blanco sí se cumple la conjetura de Fermat para todo número n >2. Y, an ≠ bn +cn , porque sus números, sus versos, sus palabras son mágicos y no necesitan demostración alguna. Buscaré cada día los lugares donde nadie confunde los caminos donde muy poco importan las derrotas… Son versos de Tierra de Luz Blanda, su último poemario escrito cuando batallaba por restablecer su salud, ya recuperada.
Pedro Puig Adam fue matemático, profesor y poeta. Alumno, colaborador y amigo de Julio Rey Pastor. Otro insigne matemático relacionado con la Junta de Ampliación de Estudios (JAE), que bajo la dirección de Santiago Ramón y Cajal y desde 1907 supuso un despertar en las ciencias y en las enseñanzas en España. Después, la larga noche del nacional franquismo enmudeció la voz de la rima y el número y los avances científicos, educativos y poéticos de aquel período de esplendor de la JAE se redujeron oficialmente a enumerar una lista de reyes visigóticos, instruir en el espíritu nacional o a loar la unidad de un imperio iniciado por otros reyes aún más católicos. La primera edición de sus ELEMENTOS DE GEOMETRÍA es de 1926. El ejemplar corresponde a la séptima tirada, en 1956.
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