Photos by Terry Mangino


Romance del Prisionero
Anónimo del siglo XVI

Que por mayo era, por mayo,
cuando hace la calor,
cuando los trigos encañan
y están los campos en flor,
cuando canta la calandria
y responde el ruiseñor,
cuando los enamorados
van a servir al amor;
sino yo, triste y cuitado,
que vivo en esta prisión;
que ni sé cuándo es de día
ni cuándo las noches son,
sino por una avecilla
que me cantaba al albor.
Matómela un ballestero; 
dele Dios mal galardón.
La carga de los Mamelucos. 1814. Francisco de Goya. Museo del Prado